Ya hemos hecho historia, ya se ha cumplido un sueño, ya hemos construido otra utopía. Jugando la semifinal del Mundial de fútbol ya habíamos cumplido un sueño nunca antes conseguido. Tras un partido épico, de fútbol rebosante, de un compañerismo que se traslada al terreno de juego haciendo gala de una compenetración absoluta; hemos pasado a la final del Mundial de Sudáfrica.
En estos momentos España late a la vez, nuestro país vive un sentimiento de superación y optimismo que rompe barreras. La selección es el espejo en el que nos miramos, un espejo de humildad, compañerismo y lucha que ha conseguido, de nuevo, unir a un país entero en torno a un valor tan grande como el deporte.
El deporte une, y hoy más que nunca todos somos un solo grito de ánimo hacia nuestros internacionales. Todos estamos juntos en el ánimo de conseguir un hito tan importante para el deporte español y para un país grande. Un país que lleva 30 años dando lecciones de superación, de progreso, de optimismo, de trabajo. Un país que deposita en los Del Bosque la ilusión y el sueño de poder conseguir la copa del mundo. Ánimo, estamos con vosotros. Enhorabuena ESPAÑA.
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