Javier García

14 septiembre, 2007

Imaz, el precio ¿de una estrategia?


La generosidad de Imaz, el precio de una estrategia en favor del PNV y de Euskadi.
Esta semana hemos conocido una noticia que sin duda a algunos nos ha entristecido, aunque no sorprendido. Josu Jon, Presidente del PNV, ha decidido abandonar su cargo, en favor de Euskadi y de la situación ante el problema terrorista en España.
Llevamos meses asistiendo al ataque de algunos ex-dirigentes peneuvistas hacia Imaz, por el cambio de rumbo que ha imprimido al partido, un cambio necesario, que ha situado el nacionalismo vasco frente a ETA, apoyando al Gobierno de España en su lucha, en contra de las tesis más radicales representadas por el ahijado de Arzallus, Joseba Eguibar.
Tras meses de discursos, Josu Jon, ha decidido dejar lo que más le gusta, en favor de su partido, obligando, o eso esperamos, que su contrincante Eguibar decline su postulado para presidir el EBB. Mi sentimiento ante esto, es tristeza, que no sorpresa, dado la talla de este político vasco al que he elogiado en anteriores post. Lo único que espero es que el PNV no cambie su rumbo, su moderación y su sentido de estado ante el problema de ETA, y que el sucesor de Imaz sea Urkullu, que encarna los valores de anteponer la paz a la política, al igual que Josu Jon.
Suerte para el PNV, sus dirigentes, y todos los vascos, puesto que es un partido centenario, ejemplo en cuanto a su organización interna, que sin duda es imprescindible para solucionar el problema que supone el terrorismo absurdo de ETA.

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